Para una que les ligó.. todos quieren ser Río
El epítome de lo populachero, de la autoridad patética que
quiere congraciarse con las supuestas mayorías, del despilfarro de recursos que
debieran ser para algo que sirva, en algo más que un adorno… un esperpento
sobredimensionado, sin sentido, cuya apreciación está reservada sólo para una porción de la población en franco descenso, que en unos causa un
enaltecimiento plástico.. forzado y en
otros un sentimiento de desprecio y asco. Berrinchudez? No, atentado a la
ciudad.
Como arte no pasan de ser copias casi estandarizadas con
diferentes matices... Algunos más cubistas, otros más Art Nuovo y otros más
chicha, pero en sentido todos son lo mismo.. No hay. Las cuatro mojigatas que van a rezar a esa monstruosidad
de concreto/fibra de vidrio con significado postizo, que dicen “qué bonito” y
que se trepan a sus pies como si fuera un lugar turístico, no se enteran de lo que
hay detrás de estos mamarrachos. Robo! .. “donaciones” producto de un robo a la
ciudad de proporciones épicas.. de un oscurísimo
supéravit, de una mediocre recomendación
de una oficina de márketing, de responsabilidad social o de imagen institucional, de entidades o sujetos a los que comprar eso
no le cuesta nada, para los cuales eso es un chancay, un costo marginal. Lo
hacen por fieles? Por caridad? Por qué!
Algunos los colocan sobre sitios en los que debería haber
alguna otra cosa totalmente distinta (Un espacio público, un anfiteatro o un
centro cultural, por dar algunos ejemplos). Pero no.. Un adorno gigante y
hueco, que a lo máximo sirve de mirador y de postal chabacana de una identidad
postiza, robada de un lado a otro, que solo gusta a un sector (y eso..) Y de ínfimo valor histórico.. Una irrelevancia.
Por más que los iluminan con led´s de colores, con sus reflectores o con áreas verdes
alrededor, no pueden verse bien.. Son forúnculos que no hacen más que malograr
la ciudad con su grotesca desproporción e imponer una idea, de una manera un tanto agresiva.. brutal.
Al menos los edificios brutalistas intentan imponer el poder de algo de lo cual todos sin excepción estarían
de acuerdo: de la institucionalidad, solidez y seriedad de las entidades que dan servicios
a la población, que están sobre uno, pero a la vez, a la orden. Lo cual evidentemente
no tiene nada que ver con caridad ni misericordia cristiana, es simplemente una
de las funciones a la que están obligadas
las instituciones en una democracia, a
la protección de las poblaciones más vulnerables.
Los edificios brutalistas arquitectónicamente evocan formas e ideas abstractas, riqueza espacial,
sentimientos en tiempo real, lecturas espaciales con algún artificio, efectos
escenográficos, funcionalidad y racionalidad, cosa que es bastante difícil resolver
en una escultura gigante con molde estandarizado.
Cristo de Swiebzin Polonia, como si no existiera la crisis.
Los cristos gigantes en cambio, evocan el poder de la
iglesia, aquella que se mantiene arriba enquistada, con sueldos nada escasos,
algunos salidos de los impuestos que
todos pagan, moviendo plata como locos, cortando derechos de quien les da la
gana y velando por sus intereses escudándose en su supuesta responsabilidad
social.. Lo que ellos llaman y fardan de caridad.
Algunos compiten, quien malversa más fondos en hacerlo más grande!
La caridad cristiana en la actualidad, es aquella donde tiene que existir
una población desgraciada y una élite
eterna ebria de poder, a la que le
sobran los recursos
lo suficiente como para regalar sin perder la rentabilidad, a la que una
oficina de imagen institucional le pone en números la cantidad de migajas que hay que regalar mínimas para
salir en medios y que se entere todo el mundo sin tocar la ganancia
proyectada. Y ahí vemos a las señoras reinas de la casa suspirando.. oh! Qué buenos
cristianos! Es esa “caridad” la que te dice: Toma tu estatua, tu bolsa de arroz y tu sueldo mínimo vital.
¿Qué significa cada uno de esos cristos puestos por
políticos y empresas privadas? Significan populismo barato, hacer la finta,
malversación de fondos, salida y entrada de capital, enganchar proveedores, puntos en las
encuestas.. Chupada de medias. No
significa ni caridad ni bondad ni “se lo regalo al pueblo” sí claro. Si realmente piensan tener misericordia de
una población vulnerable y dar caridad,
se puede por ejemplo, no evadir
impuestos, exigir una mejor gestión de
programas sociales a quien fuere que esté en el poder, apoyar políticas de
inclusión, vender a precios sociales, democratizar la información y la
producción, etc. etc.. Hasta más se hace donando plata a ONG´S protectoras de
derechos humanos, por favor!!
Cristo de Huanta, Ayacucho. Al menos los pliegues están bien hechos
Cristo Resucitado sobre una tabla de planchar - Tumbes
Cristo de Torata, Moquegua, para que te vayas a fotografiarlo.
Cristo "Petrolero" de Talara, ubicado sobre un banco, interpretación literal de torre petrolera.
El Cristo Blanco de Cusco con su enrejado estilo cárcel no podía faltar.
Las virgenes no se quedan atrás. Esta parece hecha de papel marché, en Junín
O la famosa Virgen que por su peso no pudo ser puesta encima de la cúpula de la iglesia del Inmaculado Corazón de María en Magdalena. Ahora sobre estas patas de concreto que la elevan de entre la niebla como un alma en pena. Como un ovni aterrizado ahí, ocupando el sitio un altar donde debería haber un espacio para la cultura.
Para concluir, es por eso que estoy totalmente de acuerdo con la
prohibición de imágenes religiosas en infraestructura pública. Los católicos no
son el 100% y están disminuyendo a pasos agigantados. Si no al lado de cada
virgencita tendrían que poner a todos los ídolos de todas las religiones del
mundo, incluyendo a Kim Yong Il, MONESVOL y Chuck Norris. Si quieren culto y relaciones públicas, a dar dinero dentro de sus templos.